A 36 años de su asesinato a manos de la dictadura militar, el cantautor será despedido desde mañana a las 12.
Agencia Télam
A 36 años de su asesinato a manos de la dictadura militar, el cantautor chileno Víctor Jara será despedido desde mañana a las 12, y por tres días, por su pueblo en Santiago de Chile con un funeral masivo organizado por su familia y la Fundación que lleva su nombre.
"Es el funeral que Víctor nunca tuvo y que merece. Víctor va a estar en la Fundación todo el día y vamos abrir las puertas a todos los que quieran acercarse para acompañarlo a él y a su familia", formuló a Télam, Gloria Konig, directora de la Fundación.
En diálogo telefónico, Koning anunció que este sábado a las 10, los restos del emblemático trovador serán llevados por la gente hasta al Cementerio General de Santiago.
Jara fue secuestrado el 11 de septiembre de 1973, día en que Augusto Pinochet tomó el poder a través de un golpe de Estado. Cinco días más tarde Jara murió acribillado a balazos y fue enterrado casi en secreto.
La directora de la Fundación agregó que en la Plaza Brasil se realizará la exposición "Víctor Jara canta el mundo", de la cual participarán artistas y actores, que lo recordarán "leyendo un poema o interpretando sus canciones".
El creador que orientó su obra artística a dar testimonio de las luchas sociales y acompañó el proceso que llevó al socialista Salvador Allende al gobierno, es autor de temas esenciales como "Te recuerdo Amandaö, "Paloma quiero contarteö, "Juan sin tierraö, "El derecho de vivir en pazö, "El cigarritoö, "Manifiestoö y "Plegaria a un labradorö.
El 4 de junio de este año, el cuerpo de Jara fue exhumado en presencia de su esposa Joan y de sus hijas Amanda y Manuela, para trasladarlo luego al Instituto Médico legal con el fin de realizar los peritajes correspondientes a la investigación de su asesinato.
"Cuando fue asesinado lo habían sepultado de manera clandestina. El 4 de junio su cuerpo fue exhumado y se llegó a dos conclusiones fundamentales: que el que estaba ahí era Víctor Jara, y que fue brutalmente torturado y baleado", explicó Koning.
"El funeral no significa el cierre de un ciclo porque -especificó- su crimen sigue impune, no sabemos quiénes lo asesinaron".
"Demandamos verdad y justicia, que son necesidades absolutas. Para el caso Víctor Jara es una exigencia que se reafirma con el dolor que significó remover su tumba", redondeó.
Para Gloria, la trascendencia de su obra está ligada a su forma de mirar la vida, a su canto épico y al compromiso con su pueblo. "Era un hombre profundamente enamorado de la vida, un artista que fue el cantor de su pueblo, con el que estaba comprometido no sólo desde la música y el teatro. No alcanzó a vivir 40 años pero su legado es enorme", concluyó.
"Es el funeral que Víctor nunca tuvo y que merece. Víctor va a estar en la Fundación todo el día y vamos abrir las puertas a todos los que quieran acercarse para acompañarlo a él y a su familia", formuló a Télam, Gloria Konig, directora de la Fundación.
En diálogo telefónico, Koning anunció que este sábado a las 10, los restos del emblemático trovador serán llevados por la gente hasta al Cementerio General de Santiago.
Jara fue secuestrado el 11 de septiembre de 1973, día en que Augusto Pinochet tomó el poder a través de un golpe de Estado. Cinco días más tarde Jara murió acribillado a balazos y fue enterrado casi en secreto.
La directora de la Fundación agregó que en la Plaza Brasil se realizará la exposición "Víctor Jara canta el mundo", de la cual participarán artistas y actores, que lo recordarán "leyendo un poema o interpretando sus canciones".
El creador que orientó su obra artística a dar testimonio de las luchas sociales y acompañó el proceso que llevó al socialista Salvador Allende al gobierno, es autor de temas esenciales como "Te recuerdo Amandaö, "Paloma quiero contarteö, "Juan sin tierraö, "El derecho de vivir en pazö, "El cigarritoö, "Manifiestoö y "Plegaria a un labradorö.
El 4 de junio de este año, el cuerpo de Jara fue exhumado en presencia de su esposa Joan y de sus hijas Amanda y Manuela, para trasladarlo luego al Instituto Médico legal con el fin de realizar los peritajes correspondientes a la investigación de su asesinato.
"Cuando fue asesinado lo habían sepultado de manera clandestina. El 4 de junio su cuerpo fue exhumado y se llegó a dos conclusiones fundamentales: que el que estaba ahí era Víctor Jara, y que fue brutalmente torturado y baleado", explicó Koning.
"El funeral no significa el cierre de un ciclo porque -especificó- su crimen sigue impune, no sabemos quiénes lo asesinaron".
"Demandamos verdad y justicia, que son necesidades absolutas. Para el caso Víctor Jara es una exigencia que se reafirma con el dolor que significó remover su tumba", redondeó.
Para Gloria, la trascendencia de su obra está ligada a su forma de mirar la vida, a su canto épico y al compromiso con su pueblo. "Era un hombre profundamente enamorado de la vida, un artista que fue el cantor de su pueblo, con el que estaba comprometido no sólo desde la música y el teatro. No alcanzó a vivir 40 años pero su legado es enorme", concluyó.
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